En la actualidad, el 90% de camas UCI a nivel nacional se encuentran ocupadas. Esta problemática que se agudizó durante la pandemia no ha sido atendida por quienes dirigen las principales instituciones de Salud: Minsa y EsSalud.
Lima 3 de enero del 2025.- La región de Áncash enfrenta una situación crítica en su sistema de salud debido a la alta ocupación de las camas de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). De acuerdo a un reciente informe publicado por el diario Expreso, el 90% de estas camas están ocupadas, lo que ha llevado a que pacientes en estado grave tengan que esperar semanas en hospitales de nivel II para ser trasladados a una UCI.
Esta problemática se ha visto agravada por la pandemia de COVID-19, que ha incrementado la demanda de atención médica especializada. La falta de disponibilidad de camas UCI no solo afecta a pacientes con COVID-19, sino también a aquellos que requieren cuidados intensivos por otras enfermedades o emergencias médicas.
Las autoridades sanitarias de la región han reconocido la gravedad del problema y están trabajando en estrategias para aumentar la capacidad de las UCI, incluyendo la instalación de más camas y la contratación de personal especializado. Sin embargo, estas medidas requieren tiempo y recursos significativos, por lo que se insta a la población a mantener las medidas de prevención para evitar un mayor colapso del sistema de salud.
La crisis no es ajena a EsSalud
En julio del 2021, tras varios meses de investigación, el Ministerio Público arrestó a nueve individuos, incluidos dos funcionarios de confianza de Essalud, bajo la sospecha de integrar una red que negociaba el acceso a camas UCI en el Hospital Nacional Guillermo Almenara.
Según esta indagación, una presunta organización criminal habría explotado la desesperación de varias familias al ofrecer gestionar el acceso a camas UCI a cambio de altas sumas de dinero. Entre los implicados figuran Pedro César Pino Gonzáles y Nery Magali Ochoa Menacho, coordinadores de la Oficina de Atención de Hospitalización de la Red Prestacional Almenara, responsables de supervisar la asignación y uso de camas en dicho hospital.
A pesar de contar con fondos suficientes para garantizar la operatividad de estas camas, la gestión de la actual Presidenta Ejecutiva de EsSalud no ha implementado medidas efectivas para resolver esta problemática. Su inacción frente a la paralización de equipos y camas UCI evidencia la falta de liderazgo y compromete la seguridad social del país. Por ello, resulta imperativo exigir su renuncia para evitar un mayor deterioro del sistema de salud y garantizar la atención adecuada a los asegurados de EsSalud.
